jueves, 2 de agosto de 2007

Baila, Baila...Mueve las nalgas!

Nadie pretende que en dos semanas seamos unas cubanas moviendo las caderas al son del merengue y la salsa, pero se supone que si uno toma clases, debe evolucionar y no pertencer al grupo de "los aprendices maderas para el meneo"... Más a quien le importa! Nosotras vamos a clases aunque llueva -nunca tan buenas alumnas-.* Obviamente que aún conservamos ese temor escénico de principiante y colocamos nuestros cuerpos danzantes en el fondo del salón... Parecemos alumnas de jardín de infantes. Observamos risueñas, llenas de esperanza, la clase de avanzados.Que movimientos! se cuelgan, se dan vueltas, quedan en 180º con las piernas...y soñamos que con perseverancia y dedicación podremos pasar de grado...aunque aún no coordinemos el mambo -esencial para dar el primer paso de salsa y merengue-.
Pero nada de lo que nos digan ni la vergüenza podrá opacar estos cuerpos, toscos y blandos, pero con ansías de moverse al son del tambor y poder algún día menear las piernas, las caderas y los brazos a la misma vez!Pero como dijo Hermana Lau: "Hola!, yo, comunicador...dame palabras y te armo lo que sea. Manos y pies coordinados, imposible!"... Cuanta razón!Eramos tan feliz leyendo Popper y comiendo bizcochos, hasta que tuvimos la grandiosa idea de ponernos en actividad física, y con el sueño de danzar como la chica de la película, nos lanzamos a aprender a bailar salsa...No nos importó nada de lo que nos pasara... el primer día de instrucción, un nene de 5 años del club se largó sobre los glúteos de Lau... muy decrépito (entiéndase un nene que parecía un enano viejo) e irrespetuoso que a la primer puteada que gritamos, comenzó a amenazarnos con sus partes masculinas!No miento!True Story!
Pues bien, ya habiéndo sido intimadas por una criatura, no podíamos dejar que eso interfiriera con nuestro destino: Bailar, bailar, moviendo las nalgas!Incluso esta misma noche, cuando volviamos de clase, unos sujetos que iban en un carrito me arrojaron una piedra!increíble!Parece ser que el mundo conspira contra nuestro talento!Sean pacientes!poco se puede hacer en tres clases y menos aún cuando nos pisamos los pies, no reímos, me toca una pareja muy alta o bien, Laura pisa mis pantalones porque son muy largos!Exijo una explicación!

*Menos Mama Caro que lleva varias semanas con gripe. Es importante destacar que, la 1º clase que tuvimos, madre e hijas fuimos juntas, y de tanto alboroto sudoroso y acalorado, salimos a la calle cual día de primavera, lo que nos costó un resfrío que se cobró nuestra 2º clase!

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajajaj y bueno... no nos demos por vencidas Mary!! Sigamos bailando y si no mejoramos... asumamos que somos minusvalidas del baile!!
y sigamos bailando!! aunque sea solo para bajar los bizcochos!acordate q las caderas no mienten jajaja
Lau.